Santo Domingo de Silos, que se remonta al s. XI, es una villa pequeña, pero encantadora. Se sitúa en el sureste de la provincia de Burgos, Castilla y León, y pertenece a la comarca de Sierra de la Demanda, aunque también forma parte del famoso Triángulo del Arlanza, junto a los pueblos de la comarca del Arlanza: Lerma y Covarrubias.
Si a ti no te gusta entrar en museos o monumentos históricos, si eres más de pasear por las calles y buscar miradores, sería suficiente una visita de un par de horas. Si, al contrario, no pierdes ni un museo, reserva media jornada como mínimo.
Para que puedas completar tu visita, te contaremos por qué es tan emocionante el Desfiladero del Río Yecla y qué pueblos con encanto se puede ver en las cercanías de Santo Domingo de Silos. ¿Te apetece ver fósiles milenarios de árboles que se encuentran esparcidos por un pueblo casi desconocido por los turistas? Sigue leyendo.

Qué ver en Santo Domingo de Silos
Aunque un domingo por la mañana no es el mejor momento para visitar Santo Domingo de Silos si quieres hacer visitas turísticas (mira apartado Horarios más abajo), hay algo muy especial que sucede a esa hora y ese día. La misa. Pero antes, suenan las campanas y su melodía recorre todas las calles estrechas del casco urbano y todas las laderas de las montañas que rodean Santo Domingo de Silos. Si además tienes una mañana de sol, ver cómo se refleja en las ventanas de las casas antiguas con el sonido de las campanas de fondo es una auténtica delicia.

Atractivos principales de Santo Domingo de Silos
La visita más importante en Santo Domingo de Silos es, sin duda, Monasterio del s. X, de Santo Domingo de Silos, de monjes benedictinos. Dentro de la abadía también se encuentran Museo de piezas medievales y Botica (del s. XVIII). Los accesos a la misa y a la visita turística son diferentes, igual que los horarios. En la plaza Mayor está la oficina de turismo donde puedes consultar los horarios y los precios de la visita. Incluso si está cerrada – el fin de semana – dejan un listado con todos los horarios y precios fuera.
Otros imprescindibles de Santo Domingo de Silos son Basílica de San Sebastian, Iglesia de San Pedro (en la misma plaza principal. Alberga la Virgen del Mercado, patrona de la localidad), Arco de San Juán, al lado del hotel donde nos alojamos (mira el apartado Dónde dormir más abajo), Convento de San Francisco (a las afueras, también es una Hospedería), y Museo Sonidos del Mundo (ubicado en la Casona del s. XV, escondida en las calles estrechas del casco antiguo. Tiene horario aún peor que la mayoría de las cosas en Santo Domingo de Silos: cerrado hasta mayo). Finalmente, en Santo Domingo de Silos hay dos ermitas muy bonitas: la de Santiago de Silos (a las afueras del pueblo) y la de la virgen del Camino. Si te alojas en el mismo hotel que nosotros, esta última ermita está al lado.

Otros encantos de Santo Domingo de Silos
Callejear por el casco histórico de este pueblo es un verdadero encanto, especialmente, los días de calor. Entre los edificios antiguos, situados cerca uno del otro, siempre disfrutarás de sombra y frescor.
En el patio del monasterio (entrando por la puerta NO turística), encontrarás un árbol singular. Es una secuoya gigante de mas de 120 años que viajó hasta aquí desde Canadá. Sus primeros años eran bastante difíciles de sobrevivir ataques permanentes de cabras y ovejas, pero gracias a los cuidados de un monje, aquí está, impresionándonos a todos quienes venimos a contemplarlo.
Callejeando por el pueblo, encontramos puertas muy bonitas y… ¡gatos! De estos últimos hay unos cuantos por el pueblo. Son bastante raros: tienen miedo a la gente, pero, en vez de huir en dirección contraria del turista, van hacía él… Cuidado por si quieres acariciar algún gato loco de Santo Domingo de Silos.
Un poquito más arriba, detrás de la última casa, comienza la senda hacía el Cementerio de Sad Hill, el mítico cementerio de la película «El Bueno, el Feo y el Malo» una parte de la cual fue rodada aquí en 1966. El resto de la película se hizo en los desiertos de Almería. Nosotros en nuestro viaje por el Cabo de Gata también nos topamos con los escenarios de esta película. Ahora aquí. ¿Es una indirecta que tenemos que ver la película? ¿La has visto? ¿Qué tal?

Consejos prácticos para visitar Santo Domingo de Silos
Aparcamiento: dónde puedas. Si llegas temprano, podrás aparcar hasta en la plaza principal. Si no, en un extremo del pueblo, de camino al desfiladero del río Yecla, hay un parking disuasorio.
Horarios: los domingos la mayoría de las atracciones abren a partir de las 12.00 o incluso 13.00. Si haces noche en Sto. Domingo de Silos y te levantas temprano, te vas a aburrir. Los bares suelen abrir pasadas las 9.00. Soledad y tranquilidad totales un domingo por la mañana.
Dónde dormir: nosotros nos alojamos en el hotel Arco San Juán. Buena ubicación. Bonitas vistas. Cómoda habitación. Sin mayores incidencias. Lo único: no nos avisaron de que no se podía llegar hasta el hotel en coche por la calle por la que manda Google Maps, porque estaba en obras. Tuvimos que aparcar malamente en el pueblo e ir andando. Y otro problema, un poco más grave: en el desayuno solo sirven bollería industrial. Nada más, ni tostadas. Intentamos desayunar en el pueblo. Pero el tema de los horarios ya lo conoces.
Cómo llegar: si puedes pasar por BU-910, el tramo que va hacía N-234, perfecto. Entonces, verás el Cañón del río Mataviejas. Aparte del nombre más que curioso, presenciarás un paisaje dramático, de carretera llena de curvas entre altas montañas.
Qué comer y beber: cabrito y lechazo asado son las especialidades. Además, embutido casero, sopa castellana, carne de caza de la Sierra de la Demanda y trucha del río. Vinos: de la DO Ribera del Duero y Arlanza. Postre: postre del Abuelo (queso de Burgos con nueces de Silos y miel).
Más sobre Santo Domingo de Silos: web del ayuntamiento y turismo.
Alrededores de Santo Domingo de Silos
Si decides explorar la zona de Santo Domingo de Silos, te damos un par de ideas qué se podría ver fácilmente en un día. Una propuesta va sobre naturaleza y una ruta. Otra, sobre curiosidades arqueológicas y arquitectónicas.

El desfiladero del río Yecla
El desfiladero del río Yecla es una oportunidad perfecta para disfrutar de la fuerza máxima de la naturaleza agreste sin prácticamente ningún esfuerzo físico. Aunque pueda sonar peligroso y vertiginoso, es una ruta apta prácticamente para todos: niños, adultos que no hacen nada de deporte, gente con vértigo. Básicamente, porque se camina por pasarelas de metal con barandillas a ambos lados.
¿Te he animado a conocer el desfiladero del río Yecla? Me alegro. Porque es un verdadero espectáculo. Aunque es un itinerario muy fácil, la sensación de estar casi aplastado por dos montañas que se juntan protegiendo el paso del río Yecla metros abajo de la pasarela, es escalofriante. Parece mentira, pero a la medida que te vayas adentrando al desfiladero, el sol va desapareciendo, las temperaturas van bajando y el murmullo del río se va convirtiendo en un rugido de un animal salvaje. De repente parece que estás atrapado entre las curvas imposibles del desfiladero y que nunca vas a ver la luz del día de nuevo.
Justo en el momento más desesperante, vuelve a entrar el rayo del sol para guiarte y para reanimar tu cuerpo, medio congelado.

Consejos prácticos para realizar la ruta del desfiladero del río Yecla
- Como habrás entendido, dentro hace muchísimo frío, sea cual sea la época. Abrígate bien.
- Hay bastante aparcamientos a lo largo de la carretera BU-910 entre los dos extremos de la ruta del desfiladero del Río Yecla.
- Se tarda 5 minutos desde Santo Domingo de Silos en coche.
- Puedes ir en ambas direcciones.
- Se puede hacer circular, pero no merece la pena, porque la vuelta sería por la carretera atravesando un túnel.
- Conviene venir cuanto antes, pero no por el parking, sino porque las pasarelas son bastante estrechas y sería muy incomodo tener que cruzarte con otros visitantes muchas veces.
Hacinas
Aunque Hacinas no tiene nada que ver con los pueblos con encanto del Arlanza, porque ni siquiera pertenece al Triángulo del Arlanza, está muy cerca de Santo Domingo de Siles y se merece una visita. ¿Por qué? Por sus árboles fósiles, en primer lugar. Tienen un par de árboles de miles de años de edad distribuidos por todo el pueblo.
Además, tienen iglesia en roca. Y un campanario esculpido en la punta de un pedruzco enorme. Por cierto, no es el único pedruzco de Hacinas y todos están ocupados por cigüeñas. Al parecer, es una localidad tranquila donde los aves se sienten muy a gusto.
Hablando de pedruzcos. Hay muchos diseminados por el pueblo de Hacinas, entre casas o en medio de las calles. Parece como si alguien los hubiera tirado desde el cerro y se clavaron donde les dio la gana.
Al lado de la iglesia están las ruinas del castillo. O eso dicen. Porque del castillo queda poco. Necesitas mucha imaginación para creértelo. De todos modos, merece la pena subir hasta la última roca del castillo, porque las vistas son preciosas. Hasta se pueden ver bien las cigüeñas-baby en el campanario sobre el pedruzco. Ohhhhh.
