La ruta de las Gorges de Caranca es una ruta muy entretenida, variada y bonita. La verdad es que tiene un poco de todo. Emociones fuertes para los que tienen vértigo. Paisajes impresionantes para los amantes de la fotografía. Cambios de terreno y vistas para los que buscan algo diferente a cada paso.
El itinerario empieza con las famosas cornisas, o balconadas, excavadas en la roca sobre el desfiladero, estrechándose cada vez más hasta tal punto que son necesarias cadenas para agarrarse. Al terminarse las balconadas, entras en la zona de pasarelas, puentes, escalones etc. de metal. Y la vuelta es una mezcla de vistas panorámicas desde la senda vertiginosa y un paseo tranquilo por el borde del río.
Dónde empezar la ruta de las Gorges de Carança
La ruta de las Gorges de Carança se encuentra en el valle pirenaico de Carança, cerca del pueblo Thués-entre-Valls en el Pirineo Catalán, Francia.
Empieza en el parking habilitado para tal fin. Se puede ir en ambas direcciones: comenzando por el puente desde el parking (señal dirección: La Carança par Chambre d’eau et Corniche) o por un pequeño túnel al lado del río (señal dirección: La Carança per Roc de Madrid ou Corniche). Encontrarás los carteles en el poste que está al lado del puente. La primera te llevará primero a las cornisas, con una subida de unos 200 m de desnivel al principio. En la dirección contraria primero se pasa por el río. Luego se suben unos 200 m de golpe también. Y el resto de la ruta por este lado es un constante pa’rriba-pa’bajo. La parte de las pasarelas y puentes de hierro es lineal y se encuentra a la mitad del recorrido.
Dónde aparcar: hay un parking habilitado para la ruta, seguir las señales desde el pueblo Thues-Entre-Valls. Cuesta 2€ ó 4€/coche. Nosotros en diciembre (incluido un sábado) la pillamos dos veces abierta y sin nadie para cobrar. Así que, supongo, que solo cobran en temporada alta. Si hay nieve, puede que necesites cadenas para llegar hasta el parking.
Variantes de la ruta de las Gorges de Carança
Según tu estado físico y psicológico (intensidad de vértigo), y también el tiempo del que dispongas, puedes elegir una de las tres variantes de la ruta: pequeño recorrido, grande o el completo. Si aun así te quedas corto, por la zona hay un sinfín de senderos que puedes seguir si llevas un GPS de montaña.
La ruta corta
Esta parte, de aprox. una horita de duración, es apta para todos los públicos. Tiene una subida/bajada fuerte, pero que no presenta mayor dificultad técnica y se hace al ritmo de cada uno y simplemente se tarda más o menos tiempo.
Al pasar las cornisas – a mucha altura, sin barandilla, pero bastante amplias como para poder sentirse seguros para la gente con vértigo – habrá una bifurcación. Recto: hacía las pasarelas más estrechas y otras, de metal. A la izquierda: una bajada pronunciada hacía el puente y vuelta por el río Carança. Si quieres hacer una ruta pequeña, tienes que bajar.
Si comienzas la ruta por el túnel, al lado del río, en el puente tendrás que subir hasta las cornisas y girar a la derecha para volver al parking. Al final te espera una bajada pronunciada.
La ruta larga
La primera parte coincide con la ruta pequeña. En la bifurcación hay que seguir señales “Peligro. Pasarelas”. Es decir, en vez de a la izquierda, seguir recto. Después de un tramo por un bosque de cuento, volvemos a tener vistas espectaculares desde las pasarelas escarbadas en la roca, igual que al principio de la ruta, pero mucho más estrechas y con terreno más irregular. Aquí tienes una cuerda de hierro para agarrarte o incluso anclar la línea de vida a modo de seguro.
A lo largo de todo el tramo de las cornisas, hay que tener muchísimo cuidado y evitar la zona en épocas de lluvias. Vimos muchos lugares recientes de deslizamiento de tierra y caída de roca.
Al terminar el tramo de las balconadas, seguimos por la senda entre árboles y cruzando puentes de hierro de vez en cuando. Algunos de los puentes son más estables. Sin embargo, otros, son literalmente puentes colgantes donde incluso las escaleras de acceso cuelgan en el aire y se mueven con cada movimiento. Para algunos será un verdadero reto, para otros, la parte más divertida de todo el recorrido.
Vuelta
Después de dos puentes de estos llegamos al punto donde podemos comenzar la vuelta o seguir la ruta. Si ya has tenido bastante, giras a la izquierda y sigues para arriba, pero ya por el otro lado del río Carança.
La senda de vuelta es bastante estrecha y, al igual que las cornisas, trascurre a gran altura sobre el río, abriendo vistas preciosas ante nuestros ojos. A cambio del otro lado, aquí pasamos constantemente por un bosque, así que la sensación de vértigo es mucho menor. Pero igual hay que tener mucho cuidado, con las hojas secas que cubren el sendero.
Otra dirección
Esta parte tiene constantes subidas y bajadas que puede resultar un poco cansino si no estás acostumbrado. Si éste es tu caso, igual compensaría empezar la ruta de las Gorges de la Caranca por este lado, cuando tienes más fuerzas. Desde el parking deberías segir: La Carança per Roc de Madrid ou Corniche.
La ruta completa
Decir la verdad, cuando llegamos a la bifurcación donde se podía volver, me invadió la sensación de que me faltaba algo. Justo estaba acostumbrándome a mi vértigo, empezando a disfrutar con él, o mejor dicho, a pesar de él. Y es justo cuando se acabó la ruta circular.
Sin embargo, según GPS, la poca información que encontré en Internet y una dudosa señal que ponía “Carança” a la derecha, intuía que había algo más. Decidimos seguir y no nos arrepentimos.
En la segunda bifurcación empieza la parte lineal, lo que significa que habrá que volver por el mismo sitio y pasar por cada atracción dos veces.
El tramo lineal va siguiendo el curso del río y ya no tiene la dificultad añadida del vértigo. El principal atractivo de este itinerario son las construcciones de hierro que ayudan a superar tramos difíciles. Pasado el desvío de la vuelta encontrarás:
- 3 puentes, algunos colgantes, y otros, bien sujetos;
- dos puentes colgantes a los que se accede desde una pasarela;
- 2 pasarelas bastante largas;
- unos escalones que facilitan una subidita.
Más senderos en las Gorges de Carança
Por tradición popular se aborta la ruta de las Gorges de Caranca después del quinto puente y se da la vuelta. Si sigues las marcas amarillas, al cabo de unas 3 horas, llegarás al Refugio de Carança, aunque no hay ninguna señal que lo indique.
Según ViewRanger, hay una ruta más larga que lleva de vuelta al parking por el otro lado de la misma montaña en la que están las cornisas. También se pueden hacer trekkings de varios días entre diferentes pueblos.
Datos prácticos
Dificultad
En todos los sitios pone que es una ruta de nivel fácil, sin necesidad de preparación física y apta para niños. Sin embargo, yo diría que requiere un nivel físico mínimo. También es necesaria una mínima agilidad para moverte por terrenos accidentados. Además, no me atrevería a llevar niños menores para hacer la ruta grande o completa. Hay algunos tramos donde difícilmente pasan dos personas al lado, así que habría que tenerlo en cuenta si vas con niños cogidos de la mano. Esto último es relevante para las rutas larga y completa.
Vimos a gente con perros, pero no les hacía mucha gracia a los animales pasear por las pasarelas de hierro. Tampoco podían subir/bajar los escalones. Los dueños tenían que llevarlos en brazos. Desde mi punto de vista personal, creo que existen muchas otras rutas preciosas por la zona que se pueden hacer con mascotas.
Precaución: no recomendaría la ruta de las Gorges de Caranca con lluvia o nieve, ya que hay muchos tramos resbaladizos – roca, hierro, hojas. Otra de las razones por las que hay que evitar esta ruta con lluvias es que el río puede crecer repentinamente e inundar las zonas próximas a él.
Datos técnicos para la ruta completa de las Gorges de Caranca
Desnivel: +/- 780 m.
Longitud: aprox. 7 km.
Tiempo: aprox. 3 hrs (muchas paradas para hacer fotos).
Nuestro track: puedes descargarlo desde ViewRanger.
Mejor época: creo que en verano sería una buena opción, ya que la mayor parte tiene sombra y frescor. En otoño tiene que estar espectacular con todos los árboles de hoja caduca.
Qué llevar
Ropa: cómoda, según temporada. Importante: bota de caña alta, ya que el terreno es muy accidentado si se hace la ruta completa. Algo de abrigo, porque hay tramos donde hace más frío. Guantes para agarrarte mejor de las cadenas, pasamanos, etc.
Otro: agua, algo para picar.
Donde dormir cerca de Gorges de Caranca.
En temporada alta suele haber gran afluencia de gente en esta ruta, por lo que recomendamos empezar temperado. Lo mejor es alojarse cerca del inicio de la ruta. Nosotros siempre preferimos apartamentos, ya que te dan libertad para comer, o sobre todo desayunar en casa, y suelen ser menos ruidosos que los hoteles.
Si prefieres un hotel, puedes ver todos los hoteles de la isla disponibles, aqui.
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