La Comarca de las Siete Villas se encuentra en el suroeste de La Rioja, a la izquierda de la Sierra Cebollera y debajo de la comarca de Ezcaray, perteneciendo a la región de La Rioja Alta. Es una zona sorprendente: paisajes agrestes culminan en puertos de montaña solitarios abriendo vistas a los bosques de hoja caduca en los valles dentro de los cuales se esconden pueblos encantadores. Los ríos corren por la llanura, cuyo paso natural se interrumpe por embalses que en las épocas de sequía dejan salir a lo pueblos inundados a la superficie a disfrutar del sol.
En otoño es un rincón muy tranquilo donde refugiarse del ruido y bullicio, disfrutar de las carreteras sinuosas y respirar a pleno pulmón. Siete Villas es un equilibrio perfecto entre la naturaleza, el patrimonio y su gente, en su mayoría, ganaderos. Está cómodamente ubicada a tan solo una hora de Logroño y a 2,5 hrs de Madrid, lo que hace de esta zona de la Alta Rioja un destino excelente para una escapada de un fin de semana.
Ruta en coche por Siete Villas de la Rioja
Creo que para ver y disfrutar tranquilamente de las Siete Villas de la Rioja haría falta un fin de semana completo. Aunque nosotros intentamos verlo todo en un día, al final desistimos, disminuimos el ritmo y nos dejamos llevar por el paisaje, por un ritmo de vida pausado, por las vacas y caballos que se acercaban a saludarnos cada vez que parábamos el coche. Y fue todo un acierto.
La Rioja es preciosa en cualquier época del año, pero mi favorita personal es el otoño. En los alrededores de las Siete Villas vas a encontrar muchas zonas de bosques de hoja caduca. ¡Imagínatelos en otoño!, cuando empiezan a cambiar de colores cada árbol a su manera. A mediados de octubre de 2022 justo presenciamos el comienzo de la explosión del verde, amarillo, naranja, rojo y marrón. Y cada día se intensificaba. Y cada día teníamos menos ganas de tener prisas.
En el mapa tenéis marcados todos los sitios que visitamos nosotros, pero seguro que encontraréis muchos más si pasáis por una oficina de turismo en Logroño o Mansilla de la Sierra o simplemente curioseáis por los pueblos.
Detalles a tener en cuenta a la hora de recorrer las Siete Villas:
- En la mayoría de los pueblos de la ruta de las Siete Villas no hay cobertura móvil.
- Hay algunos pueblos sin servicio de bares o tiendas. Incluso si existen, tienen un horario muy limitado. Tampoco hay muchas gasolineras. Ven preparado.
- Dónde sí que puedes “repostar” en los bares en un horario bastante amplio es en Canales de la Sierra (por la mañana el bar abre a las 11.00), Ventrosa de la Sierra, y Viniegra de Abajo y de Arriba.
- Las carreteras de acceso son buenas, pero muchas de ellas, estrechas y con curvas. Simplemente hay que tener precaución.
- Las Siete Villas son pueblos pequeños. Intentemos no montar mucho jaleo para no molestar a sus habitantes. Atención la vamos a atraer en cualquier caso. Eso sí, la gente de estos pueblos es bastante reservada y no suele ir más allá de “Buenos días” 😉
- En prácticamente todos los pueblos de las Siete Villas verás pancartas en contra del Parque Natural (por lo visto, se quiere hacer uno) y del lobo. Si eres sensible con el tema, infórmate antes de visitarlos.
Brieva de Cameros
En cuanto entras en Brieva de Cameros, te das cuenta enseguida del modo de vida de sus habitantes: los huertos rodean las casas de piedra y los canales de agua atraviesan el pueblo. Brieva fue y sigue siendo uno de los centros de trashumancia más importantes de la región. Para conocer de cerca este oficio se puede visitar el Museo de la Trashumancia (antiguo rancho de esquileo) que está en el centro del pueblo.
Además, no te pierdas las iglesias de San Miguel y de Santa María, el palacete y los jardines de los Felguera y los antiguos lavadero y fragua. Pero mi rincón favorito de Brieva de Cameros es la plaza de Pedro Duro, con el ayuntamiento, la iglesia y los jardines.
#SabíasQue: Pedro Duro nació en Brieva y en 1857 fundó la Sociedad “Duro y Compañía” con la idea de crear una fábrica de hierros. Hoy en día es la siderúrgica asturiana Duro-Felguera.
En las afueras de Brieva se puede visitar la ermita de la Soledad, el chozo pastoril (deteriorado), el crucero con el rollo y el nacedero del río Brieva (a unos 10 minutos del centro, pasada la piscifactoría).
Parking: no es fácil aparcar en Brieva de Cameros. Os hemos marcado varios puntos en el mapa. Suerte.
Siete Villas de La Rioja.
Canales de la Sierra
A primera vista se nota que Canales de la Sierra tuvo un pasado esplendoroso y pudiente. Sus casas blasonadas, numerosos puentes sobre el río Najerilla, el Palacio Condestable, el edificio del Teatro y la iglesia de San Cristóbal son solo unas de las pruebas de que los habitantes de Canales no pasaban penurias.
El edificio del Teatro es especialmente curioso, con una torre, un reloj y la figura de “papamoscas”. Nosotros no tuvimos suerte, pero si llegas en el horario de su apertura, no pierdas la oportunidad de visitar el edificio por dentro.
En lo alto del pueblo está la iglesia de San Cristóbal, del s. XII. Parece ser que su “galería porticada con capiteles ricamente decoradas de estilo castellano es un ejemplo único en la Rioja”.
Parking: En algún hueco en la carretera principal que atraviesa el pueblo. Si has venido con camper o autocaravana para pasar la noche, deja tu vehículo en el área de autocaravanas en la entrada. De allí al centro son 5 minutos andando.
#Curiosidad: no tiene cobertura móvil, pero parece que hay WiFi gratis en el pueblo. Hay que registrarse y para que te den acceso, recibir un SMS. ¡Me parece genial! Pero. No teníamos nada de cobertura. El SMS nos llegó una vez salimos del pueblo. La idea era buena, falló su puesta en marcha.
Dónde dormir en Canales de la Sierra: para los viajeros en camper, furgo o autocaravana existe un área de autocaravanas. No tiene baños ni duchas, pero sí toma de electricidad, descarga de aguas y agua fresca. Está a las afueras del pueblo, al lado de la carretera, pero por la noche pasan muy pocos coches. Bueno, decir la verdad, a mí no me despertó ninguno.
Mansilla de la Sierra
El pueblo actual de Mansilla de la Sierra es bastante diferente en comparación con otros pueblos de las Siete Villas. Te sorprenderán sus casas blancas adosadas y las calles encementadas. Parece mucho más moderno, como si lo emplazaron artificialmente entre los pueblos más auténticos, de calles empedradas y casonas con heráldica. Ni siquiera la iglesia se parece a sus vecinas.
Mansilla de la Sierre sorprende. Pero en cuanto conoces su historia, también entristece un poco. En 1960 la antigua villa de Mansilla de la Sierra fue inundada con las aguas del embalse de Mansilla: progreso y evolución, por un lado, y tragedia personal por el otro. Los habitantes del pueblo sabían que iba a suceder, incluso intentaron evitarlo, pero, al final, tuvieron que marcharse a un nuevo emplazamiento, a solo unos pocos metros del antiguo.
Justo cuando estuvimos en Mansilla “la Nueva” colocaban una exposición de piedras y heráldica del pueblo antiguo, inundado, donde el puente medieval contemporáneo. Han puesto varios carteles que cuentan su historia.
Parking: fácil, en la carretera principal sin necesidad de adentrarse en el pueblo.
Mansilla de la Sierra bajo el agua
En el punto que marcamos como “Mirador” en el mapa se puede estacionar el coche en una cuneta y subir al montículo. Desde allí se abre una panorámica sensacional sobre las ruinas que se asoman desde las profundidades del embalse en épocas de seguía.
Por lo visto, justo se están realizando las labores de conservación (vimos varios trabajadores arreglando caminos de acceso y el área (octubre, 2022)).
A pocos metros, en la carretera hay un cartel con más información. Recomendamos acercaros a pie, porque no hay donde aparcar con seguridad.
#TipViajero: A pocos metros del pueblo hay varios apartaderos donde parar el coche y avistar los restos de las casas inundadas en el pantano.
Ventrosa de la Sierra
La carretera que te lleva desde el desvío de LR333 es una preciosidad: sinuosa, siguiendo el curso del río Ventrosa, y de colores explosivos en otoño. Conviene disminuir la velocidad y no solo por las curvas, sino también para poder disfrutar del paisaje.
Lo primero que atrae la atención cuando te acercas a Ventrosa de la Sierra, es la torre de reloj en lo alto de un risco. Por supuesto, no pudimos evitar subirnos a él; hay una senda bien trotada. Desde allí se ve perfectamente cómo se divide el pueblo en dos partes y todo el panorama que lo rodea: bosques, pastos, montañas. Es un gran enclave para mantener aún hoy en día la actividad ganadera muy activa.
Callejear por las calles empedradas en los alrededores de la iglesia parroquial de San Pedro y San Pablo es todo un placer. Prácticamente cada rincón tiene una sorpresa guardada: un escudo, una casa del s. XVII o XVIII, decoraciones cuidadas, vistas magníficas. Me di varias vueltas para no perderme ni un solo detalle.
Parking: bajo el nogal, al lado de unas mesas de picnic 😉 o en cualquier otro lado de la plaza sin salirse de la LR 436.
#Curiosidad: En Ventrosa es donde encontramos la mejor cobertura móvil y de Internet (tanto Vodafone como Movistar) de las Siete Villas. Si tienes que trabajar (como nosotros) o conectarte, planifica tu viaje para hacerlo aquí.
Villavelayo
Villavelayo es un diminuto pueblo en el que unen sus aguas los ríos Najerilla y Neila para desembocar en el pantano de Mansilla a poca distancia del pueblo. Así que su casco urbano goza del frescor y el murmullo de los ríos. Y en una esquina de la plaza Mayor incluso hay un estrecho puente abierto al tráfico, solo apto para los conductores más valientes… o los más desesperados para encontrar una plaza de parking.
Probablemente, lo más curioso de Villavelayo es que aquí nació y creció la única santa nacida en La Rioja, Santa Áurea (s. XI). Su ermita (s. XVII) se encuentra en la carretera principal, al lado de la iglesia parroquial de Santa María. Los dos edificios de culto están unidos por un paseo muy agradable que permite evitar pasear por la carretera.
Parking: En la carretera principal que pasa por encima del pueblo no encontramos hueco. Tuvimos que adentrarnos un poco siguiendo las señales “centro”. Si no hay sitio en la plaza Mayor, se puede cruzar el puente (muy estrecho) e intentar aparcar en las dos plazas que encontrarás allí. El pueblo tiene bastantes cuestas, por lo que no te aconsejaría desviarte mucho de la ruta más directa que baja de la carretera.
Viniegra de Abajo
Lo que atrae la mirada en Viniegra de Abajo cuando aún estás en la carretera principal, son las casas palaciegas que contrastan con las construcciones de mampostería. ¿Señores y ganaderos viviendo al lado? Sí. Y la mayoría de los “señores” eran los “indianos”, los inmigrantes que volvieron a casa y quisieron levantar casones impresionantes dándole importancia al pueblo natal.
Cuando nos adentramos al pueblo, las casas se van mezclando con las huertas y el carácter ganadero de Viniegra de Abajo se nota mucho más. Hoy en día, al igual que en la gran parte de las Siete Villas, la ganadería es el principal motor económico.
Viniegra de Abajo es un lugar simbólico. En una de sus ermitas, en la de Santiago, se firmaron el “pergamino de la constitución de la antigua Confederación de las Cinco Villas y Valle de Canales” y también, “los estatutos del actual Colectivo de las Siete Villas-Alto Najerilla”.
Parking: hay dos parkings habilitados: uno, en la carretera principal, enfrente del ayuntamiento; se ve la señal. Y otro, a las afueras de la villa. Este último se recomienda para autocaravanas grandes, ya que el acceso al primero les sería un complicado.
#Curiosidad: Viniegra de Abajo es uno de los Pueblos más Bonitos de España (2019).
Viniegra de Arriba
Junto con Brieva, Viniegra de Arriba es el último pueblo de La Rioja que sigue teniendo ganado trashumante y que hoy en día sigue utilizando las Cañadas de las Siete Villas. También es el pueblo más alto de la comarca (se encuentra a 1.182 m). Y uno de los pueblos que “mejor ha conservado su arquitectura popular”. En fin, creo que bien se merece una visita.
#Curiosidad: justo cuando estuvimos visitando Viniegra de Arriba vimos en las colinas que lo rodean un gran rebaño de ovejas y oímos al pastor mastín ladrar a modo de aviso. Sí, lo del pueblo ganadero no es un decir.
Además de callejear, acercarse a la iglesia parroquial de la Asunción o a la ermita de la Magdalena o el lavadero de tres caños, puedes subir a la colina que hay por encima del cementerio para admirar las vistas del pueblo y de las montañas que lo rodean.
Parking: cómodamente, en la carretera principal, en los alrededores de la señal “ermita de Santa María Magdalena”.
#Curiosidad: Viniegra de Abajo es uno de los Pueblos más Bonitos de España (2019).
Dos paradas adicionales en la ruta por las Siete Villas de la Rioja Alta
Dos paradas muy recomendables en la ruta por las Siete Villas de la Rioja Alta son el Monasterio de Valvanera y el punto marcado en nuestro mapa como «Vistas al atardecer al embalse de Mansilla«. El primero requiere un pequeño desvío y el otro, está en la ruta.
Nuestros favoritos de la ruta de las Siete Villas de la Rioja
Nuestros dos top-favoritos de los pueblos de las Siete Villas de la Rioja Alta son Canales de la Sierra y Ventrosa. Y también, el mirador sobre Mansillas bajo el Agua. Por supuesto, es una opinión totalmente personal y parcial. No está basada en hechos históricos. El tiempo que hizo, la luz y nuestro humor también contribuyeron a esta opinión.
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