Puig Campana es la segunda montaña más alta de Alicante, con sus 1406 m. Pertenece a Cordilleras Prebéticas. Para coronar el pico habrá que hacer más de 1.000 metros de desnivel por un terreno complicado. En algunos puntos incluso hay cuerdas para facilitar el paso.
Descripción de la ruta de ascensión a Puig Campana
La mañana que íbamos a hacer la ruta de Puig Campana me sentía un poco nerviosa, porque no sabía muy bien en qué forma física estaba. En Internet describían la dificultad de la ruta de la siguiente manera: «Dificultad muy alta si estás en muy baja forma física. Dificultad media-alta si estás en forma física baja. Si tienes forma media, dificultad media-baja y si estás bien entrenado, dificultad baja». Llevábamos tiempo saliendo de rutas pequeñas, y éste era el momento de hacer algo un poco más serio y ver qué tal estábamos de fuerzas.
Comienzo de la ruta
Dejamos el coche en el parking de Font del Molí y decidimos empezar por la ruta tradicional, tomando el desvío a la izquierda desde el cartel con la información sobre la ruta. Teníamos 4,5 kilómetros de subida suave, siguiendo la PR-CV-289 hasta el collado de Pouet, desde el cual empezaba la ascensión a Puig Campana.
#TipViajero: Intenta venir lo antes posible, especialmente el fin de semana, porque el parking es uno de los más populares de la zona y se llena fácilmente.
La primera parte es muy relajante, empieza bajo la sombra de los árboles con el majestuoso pico asomándose sobre las montañas. El paseo por la senda, aún protegida del sol por la cadena montañosa, trascurre pacíficamente con la mirada en el paisaje verde en el horizonte, salpicado de flores bajo los pies. Lo único que me apetece en este momento es seguir caminando, casi sin esfuerzo, respirando la mezcla del aire montañés y marino. Con una sonrisa tonta tarareando una melodía sin parar, parecemos sacados de una peli romántica.
En los 4 kilómetros hacemos unos 500 m de desnivel. Justo antes de la última subidita por una pista forestal que nos llevará al collado de Pouet, inspeccionamos el refugio que está en el camino. Básicamente, es una caja de hojas de hierro donde tiene que hacer un frío terrible, pero de la lluvia y el viento sí que protege.
Ascensión a Puig Campana
Desde el collado de Pouet hay 2 kilómetros y casi 500 m de desnivel a salvar para llegar a la cima. En el primer km se hacen unos 150 m de desnivel y en los últimos 900 m, el resto. Hay un tramo un poco expuesto que a la gente con vértigo, como yo, nos haría sentir mariposas en el estómago. Es donde debo parar antes de levantar la cabeza del suelo para poder disfrutar del paisaje panorámico. Mi concentración es máxima, a menudo incluso demasiada, y hace mis piernas demasiado rñigidas. Hay momentos en los que tropiezo por eso, por estar demasiado tensa, sin poder controlar muy bien mis movimientos. Entonces paro, respiro hondo, miro el horizonte, me relajo, y sigo.
En el camino hacia arriba hay varios pasos con cuerdas, supuestamente, para facilitar la ascensión. Decir la verdad, no me sirvieron de mucho: allí donde estaban no me hacían falta. Sin embargo, un par de metros antes o después, sí.
Una vez superada la cuesta rocosa y empinada, salimos a un prado donde todo te invita a tomar un descanso. Hay un árbol perfecto que te protegería del sol bajo su corona.
Desde aquí debemos tomar la dirección que dice “Puig Campana”. Ya no queda nada hasta la cima, solo las vistas preciosas de la costa y una brisa marina que trae el aroma a sal.
La cima de Puig Campana
En cuanto llegas a la cima, no es lo que esperas. No vas a encontrar la soledad ni tranquilidad. Parece que es el mejor lugar para tener conversaciones a plena voz, gritar y contar sus penas a cuatro vientos. No funciona esperar a que baje un grupo para disfrutar del momento, porque enseguida sube otro con las mismas necesidades de auto-expresión. Lo mejor que puedes hacer es alejarte un poco hacía el otro pico y allí, con suerte, tendrás tu momento si el viento sopla en otra dirección y no te trae los ruidos.
La vuelta
Se baja por el mismo camino por la que se había subido. Mucha precaución en los tramos más empinados e irregulares.
Un desvío: durante la bajada, al acabarse la pedrera, verás un desvío «El Nevero«. Si tienes tiempo, explóralo. Es el antiguo nevero donde guardaban hielo en verano. Siempre me ha fascinado el amor al hielo en España en verano. Desde la Edad Media era uno de los bienes más preciados. Y se utilizaba tanto para curar como para disfrutar de la vida. ¿Sabías que por aquel entonces ya conocían copas con cubitos de hielo?
Para hacer la ruta circular, en el punto de información, sin llegar al collado de Pouet, hay que desviarse a la derecha y retomar la ruta PR-CV-289. Nos quedan 6 kilómetros para llegar al coche. 6 kilómetros que al principio trascurren por el bosque, pero pronto salen al terreno abierto permitiendo las vistas panorámicas de la costa.
Después de un pequeño repechito, todo lo demás es la bajada. No la vi tan difícil, incómoda o pesada como la pintan en los comentarios en el Internet. Por el camino encontrarás algunas curiosidades para parar y descansar un poco. Primero, la fuente de la Solsida que no tenía nada de agua cuando estuvimos nosotros. Luego, los árboles que trepan las rocas. ¡Me fascinan! Podría pasar horas mirándolos e intentando entender cuánta fuerza deben tener sus frágiles ramas para poder agarrarse a los microporos de la piedra. También tienes una cueva para curiosear. No se puede entrar dentro, pero el entorno es muy auténtico. Parece que te has vuelto a la prehistoria.
Tramo final
El tramo final trascurre por el bosque placentero donde se puede descansar del calor y de los rayos del sol omnipresente en los últimos 4 kms. En cuanto salgas entre las casas, te quedará 1 km para llegar al la fuente del Molí.
Se acabó la ruta de Puig Campana. Ahora es el momento de descansar y reponer fuerzas. En el post Un fin de semana cerca de Benidorm te contamos cuáles fueron nuestros sitios favoritos para comer y las playas más agradables para descansar.
Resumen
¿Qué tal nos pareció la ruta? Mucho más fácil de lo que esperábamos. Salvo algún tramo un poco más expuesto donde sufrí un poco de vértigo (Kate), no tuvimos la sensación de una ruta difícil en ningún momento.
Datos prácticos de la ascensión a Puig Campana.
Distancia y tiempo: Casi 14,5 kms. 6,5 hrs sin prisas.
Desnivel acumulado: +/- 1.160m.
Circular: Sí. Comienzo y final en el parking de Font del Molí, pasado Finestrat. Se puede empezar en cualquier dirección, no vimos mucha diferencia entre las dos partes.
Alternativas: si no tienes ganas de hacer la ascensión, la ruta circular en sí también es muy bonita. Además, en el collado de Pouet, verás el cruce para subir a otros picos.
Cobertura: en toda la ruta hay cobertura, más o menos.
Calzado y ropa: ropa, según la temporada. Arriba hace un poco de viento fresco. Calzado, cómodo. Yo prefiero bota, porque el suelo es irregular. Protección solar. Gran parte de la ruta tiene sombra, salvo la ascensión y 4 kms a la vuelta.
Agua: no hay agua por el camino. Al principio de la ruta hay una fuente, pero pone: agua no potable, solo para riego.
Mejor época para realizar la ascensión a Puig Campana: cualquiera. Si es verano, se recomienda empezar cuanto antes para no sufrir demasiado calor.
Parking: hay varias zonas para aparcar. Cuando acaban los huecos, dejan los coches a ambos lados de la carretera.
Nuestro track: ascensión a Puig Campana.