El #SeptiembreSlow se nos olvidó; habíamos vuelto al ritmo frenético viajero y llegábamos a Archena con mucho estrés acumulado y con mi ansiedad perpetua de «ver más en menos» «ya descansaré en casa» «los viajes son para estar a tope» y el cliché típico: «los balnearios son para la gente mayor, nosotros ¿qué vamos a hacer entre ellos?» etc… Nunca habíamos estado en un balneario propiamente dicho, no sabíamos qué nos esperaba y no nos imaginábamos qué se podría hacer durante tanto tiempo en un mismo sitio.
Pasamos tres días en el balneario, y en los alrededores turísticos de Archena, y… volvíamos a casa renovados: relajados, en modo #Slow y #NoPasaNada, despejados y llenos de energía, sonriendo al mundo entero y al lunes que se avecinaba 😉
Me sentía en paz conmigo misma. Y es cuando me di cuenta de que un balneario no sólo sirve para mejorar el físico y el bienestar de personas mayores, sino que…
…una escapadita de un fin de semana a un Balneario
no hace ningún mal a cualquier edad…


Nuestro Finde en el Balneario de Archena
Día 1. Introducción al mundo del relax y placer
Llegamos sobre las 18.00 a Archena y siguiendo las señales de tráfico encontramos el Balneario que está a las afueras de la ciudad.
Este día solamente tuvimos tiempo para conocer uno de los tres espacios clave del Balneario de Archena: Circuito Termal Balnea, donde, alternando frío y calor, se consigue un estado de relajación y paz interior, tan deseables después de un camino largo desde Madrid.
Una piscina curiosa es la de los limones y naranjas flotantes. No sé porque, pero a todo el mundo le gusta meterse entre la fruta y tocarla, jugar con ella, mirarla fijamente… ¿Tendrá alguna explicación científica o es una reacción subconsciente?

Uno de mis rincones favoritos de Balnea es el iglú – literalmente, imaginaros un iglú polar y sabréis a que me refiero. ¿Quién se atreve a sentarse con el bañador en banquillos de hielo?
Curioso: Fijaos en las paredes del iglú; ¿no os parece una cueva en algún planeta abandonado donde los últimos habitantes dejaron sus mensajes desesperados?
Entre las saunas nosotros preferimos la estona, la más caliente. Otro de nuestros favoritos, la estufa Archena, es muy peculiar – no tiene fuego ni piedras calientes, el vapor es procedente del agua termal del manantial, que también tiene un olor característico.
El oasis de la tranquilidad de Balnea es la piscina flotante – con aguas muy saladas que lo harán todo por ti: te sujetarán, te llevarán de un rincón a otro, y te menearán por la piscina.

#TipViajero: el parking es de pago (7€/día), pero también es posible aparcar en Archena e ir a pie; vimos mucha gente que lo hacía, el paseo es muy agradable. En la imagen podéis ver algunos puntos donde se puede dejar coche gratis.


Día 2. El Gran Combinado
Mañana: Tratamientos que alivian el cuerpo y despejan la mente
Empezamos el sábado gozando de los tratamientos de la Galería Termal, según nuestro horario personal, confeccionado por el médico del balneario y conforme con nuestras necesidades: aliviarnos del estrés diario.
Empezamos con el Masaje Archena, un masaje especial que une la agilidad de las manos del profesional con la caricia del agua termal. Luego pasamos por la ducha circular y chorro termal, para acabar en la estufa caliente, uno de los sitios más relajantes del mundo.


En ¿Por qué el Balneario de Archena es tan especial? describimos en detalle los rincones clave del balneario y nuestra experiencia en cada uno de ellos.
Tarde: Archena turística
Para mi los «monumentos» más curiosos y emblemáticos de Archena son norias y chimeneas. Las primeras están relacionadas con agricultura – Archena es el corazón de la huerta de Murcia – y las segundas, con el gran tesoro que posee la ciudad: agua termal. Entre piscina municipal y el puente de Hierro podéis ver las dos cosas.

Para conocer la historia de Archena, podéis visitar el museo local. Para mi gusto está muy bien organizado: ni te abruma con demasiada información y detalles técnicos, ni te deja con dudas existenciales.
Horario: M a D: 10.00 – 14.00 y M a S: 16.00 – 19.00.
Dirección: Avenida Río Segura, 10, al lado del polideportivo. En el mismo edificio se encuentra la Oficina de Turismo.



El centro, la verdad, no me impresionó… hay una iglesia, calles llenas de familias bien vestidas, todo limpio y cuidado; merece la pena salir a dar una vuelta. Sin embargo, lo que nos interesó – por lo auténtico y divertido que es – es el mercado al aire libre que se monta detrás del Mercado Central todos los sábados, hasta las 14.00.
#TipViajero: Muy buenos precios de fruta y verdura, y todo ¡riquísimo!





También intentamos encontrar el sitio arqueológico muy importante, supuestamente, pero no lo conseguimos, y mira que somos bastante buenos en estas cosas, por ejemplo ¡cómo nos empeñamos en descubrir los Dólmenes de Vimianzo! Pero con el yacimiento Tío Pío no hubo manera… Si lo conseguís vosotros, contad.
#TipViajero: el paseo fluvial, a las orillas del río Segura, es bonito… durante un tiempo corto, pero muy pronto se vuelve bastante monótono. A modo aviso.



Día 3. Consolidación del efecto del bienestar
Veíamos que el tiempo que pasábamos en el Balneario nos aportaba paz y bienestar, así que decidimos dedicarle toda la mañana del domingo para que el efecto nos durara más. Empezamos con tratamientos en la Galería Termal… lodo general y termachena nos llevaron dos horas de nuestro tiempo y a cambio nos dieron ese cansancio placentero que sientes cuando acabas de hacer las paces con tu cuerpo…


Reflexión: Tened cuidado con los mayores, van en búsqueda de las víctimas 😉
¿Por qué las personas mayores querían hablar con nosotros y no con la gente de su edad? Tenemos una teoría: todos querían contar su vida, y como sabían que el otro abuelo también quería hacerlo, todos iban a por nosotros; intuían que nos daría corte interrumpirles. Avisados estáis 😉
Para terminar el proceso de renovación visitamos SPA Piscinas Termales. El tiempo nos acompañó. así que pasamos un rato muy agradable nadando casi todo el rato en las piscinas exteriores, disfrutando de las vistas.


Resumen:
Pasamos un finde muy enriquecedor, ya que nos ayudó a cambiar el chip: un balneario no es solamente para personas mayores, es para todas las edades. Segundo, me reconfirmé en la idea de que ¡me encanta el agua! Y por último, visitar únicamente Archena, sin ver sus alrededores ni pasarse por el balneario, sinceramente, no lo veo. Sin embargo, organizar un finde del bienestar, y un recorrido por el Valle de Ricote, me suena a un plan muy divertido.
P.S. Alojamiento y Comida: Nos alojamos en el centro de Archena, no en el propio balneario, no comento nada porque el hotel donde estuvimos no nos convenció y comíamos de Mercadona, así que no os puedo contar nada nuevo 😉 Eso si, si vais todo el fin de semana al balneario, es mejor y mas cómodo alojarse en uno de sus hoteles.