Nuestra relación amorosa con Andorra y su GRP (Gran Recorrido alrededor del País) empezó en el Noviembre del 2012. A pesar de la información errónea que nos dieron en los refugios sobre previsión de tiempo, y casi acabamos atrapados entre las nieves, el país nos enamoró… entendimos que teníamos que trabajar duro para que nos respondiera con el mismo afecto… pero mereció la pena: andar, subir, bajar, parar, disfrutar, pasar la noche en el refugio, conocer a los tres hombre y el perro, tener muchas anécdotas para contar… El amor surgió y dura… Este año decidimos solidificarlo y continuar el GRP desde allí donde lo habíamos dejado…

Etapa 1. Hotel Peretol – Refugio de Siscaró
Longitud: 7 kms
Desnivel: +600 m -400 m
Tiempo: 3 hrs
Llegamos sobre las 14.30 al lugar donde habíamos dejado la ruta en el Noviembre del 2012, en Bordes d’Envalira, cerca del hotel Peretol… entre nieves, con cielos grises… y nos encontramos con un paisaje totalmente diferente: despejado, sol brillante, temperaturas agradables, y lo más importante – ni rastro de nieve. Aparcamos unos 300 m más abajo, en frente de un hotel, y sin más retrasos empezamos el GRP del 2014.
La bienvenida es un tanto dura – hay que remontar una pendiente bastante empinada… pero poco a poco la respiración se calma, las piernas responden con ganas a cada paso y en un momento de repente nos sentimos infinitamente libre y feliz: mezcla de endorfinas, o lo que sea, que se liberan al hacer ejercicio físico, alegría por volver a Andorra y satisfacción por continuar lo que empezamos en 2012… Nos damos la vuelta para ver el paisaje, y reconocemos cada pista al otro lado: por allí llegamos al refugio Pla de les Pedres, por la otra fuimos a buscar leña, y por aquella volvimos a Encamp – ¡hasta me pongo nostálgica!

Para la etapa de hoy teníamos 3 planes: Plan Optimista (llegar hasta el refugio Cabana Sorda, 13 km +1200 m -900 m), Plan Realista (hasta el refugio de pago de Juclá, 8 km +1000 m – 500 m) y Plan Pesimista (hasta el refugio de Siscaró, 7 km +600 m -400 m)… A las 18.00 nos sentamos en frente del refugio Siscaró para decidir si continuábamos la marcha: el sol aún estaba alto en el cielo, buen tiempo, no estamos nada cansados… y decidimos seguir, pero, tal y como nuchas veces sucede en nuestros viajes, con dos destinos diferentes en mente: Kate lo veía posible llegar sólo hasta Juclá y Denys tenía esperanzas de acabar en Cabana Sorda…
Escape/Inicio del GRP con el que cruzamos por el camino: justo antes de empezar la bajada al refugio de Siscaró, hay un desvio a Soldeu por GRT (bien marcado)







Reanudamos la marcha… y en 10 minutos nos topamos con el único cruce conflictivo de todo el GRP que hicimos hasta el momento: había flechas para el refugio de Siscaró (que acabamos de pasar), para el lago de Siscaró (de donde hemos venido) y para el valle Incles… y ninguna señalización para continuar el GRP. Según el mapa, teníamos que empezar a subir otra vez. Perdimos aquí un poco de tiempo, pero descubrimos por dónde hay que seguir – hay que cruzar un puentecito como si fuera en la dirección del refugio, pero en vez de girar hacía él (a la derecha), seguir recto y empezar a subir; hay marcas después del puente. Ya se nos hacía tarde. Estaba claro que sólo podríamos llegar hasta Juclá… pero Denys no estaba dispuesto a pagar (15€/persona) y nos quedamos en el refugio de Siscaró (10 plazas).





Otro escape/inicio del GRP: por el Valle de Incles, hay una senda marcada que sube hasta el refugio de Siscaró por la que también podéis bajar a la civilización 😉
Enseguida tuvimos visita – las vacas curiosas pasaban por el refugio y metían las cabezas en la puerta para ver lo que hacíamos y pedir sal 🙂 Una incluso se auto-invitó a nuestra cena e intentaba probar lo que teníamos en el plato 😉 La primera cena en los trekkings normalmente la hacemos con todo lujo: aún se permite el extra-peso en la mochila, así que teníamos cerveza, jamón y queso de aperitivo y panceta a la barbacoa de plato fuerte ;))) ¿A qué no se come mal en los trekkings? 😉
El sol se puso sobre las 20.00 – 20.30, y como a las 21.00 ya estaba de noche, no teníamos otra cosa que hacer que irnos a dormir 😉 Buenas noches. Hace un poco fresquete, pero si os metéis en una cama los dos, se aguanta bien 😉





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